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General

Observatorio de Salud y Cambio Climático

El pasado 18 de julio se aprobó, en Consejo de Ministros, la creación del Observatorio de Salud y Cambio Climático (OSCC), nuevo órgano sectorial concebido por las evidencias científicas que relacionan ambos ámbitos.

27 de Julio de 2023

cielo azul con nubes y olivos debajo

Una ciudadanía, cada vez más convencida de la relación existente entre los efectos del cambio climático y las afecciones a la salud, necesita información, con mayor detalle e inmediatez, de los episodios climáticos que pueden afectar a su estado de salud.

En noviembre de 2021 se aprobó el PESMA, Plan Estratégico de Salud y Medio Ambiente, coordinado por el Ministerio de Sanidad, y el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático (PNACC), coordinado por el MITECO. El objetivo de este Plan es el abordaje de los riesgos para la salud derivados de los factores ambientales y sus condicionantes y pretende dar respuesta al compromiso adquirido por la Declaración de Emergencia Climática de 2020, tal y como ocurrió con otras medidas en materia ambiental que tienen vocación de lograr un entorno saludable para los ciudadanos (Programa Nacional de Control de la Contaminación Atmosférica, que recoge las medidas necesarias para reducir nuestras emisiones contaminantes en esta década;  Índice de Calidad del Aire, herramienta básica de información al servicio de administraciones y ciudadanos; Plan marco de acción a corto plazo en caso de episodios de contaminación del aire ambiente, que garantiza una respuesta homogénea en todo el territorio ante situaciones de alta contaminación; etc.).

Dentro del PESMA se contempla la necesidad de establecer mecanismos de gestión que impulsen el trabajo y la coordinación de las actuaciones previstas entre todos los actores implicados, reforzando el enfoque One Health y es por ello por lo que, el pasado día 18 de julio, dando cumplimiento al PESMA y con el objetivo de aunar todas las iniciativas para abordar el impacto que el cambio climático tiene sobre la salud con la transversalidad que requiere, se crea el Observatorio de Salud y Cambio Climático (OSCC), un nuevo órgano colegiado intersectorial para apoyar el análisis, diagnóstico, evaluación y seguimiento de los efectos de la emergencia climática en la salud, al tiempo que ofrece apoyo científico-técnico a las Administraciones públicas.

En la actualidad, el Ministerio de Sanidad hace un seguimiento de los diversos indicadores relacionados con este factor como la mortalidad por calor o los casos de enfermedades tropicales. Por su parte, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD) desarrolla predicciones y hace seguimiento de eventos extremos que pueden resultar peligrosos para la salud, como olas de calor o lluvias torrenciales, así como proyecciones que permitan anticiparse a los escenarios futuros de cambio climático. Además, el Ministerio de Ciencia e Innovación fomenta la investigación en materia de salud y cambio climático en el Sistema Español de Ciencia, Tecnología e Innovación además de contribuir a la generación de conocimiento científico para la evaluación y prevención de riesgos y, a su vez, presta asesoría científico-técnica a las administraciones a través de los organismos públicos de investigación adscritos al departamento de tal manera que todos los cometidos están delegados a diferentes entidades que, a través de este Observatorio, van a imbricarse para poder ser más eficaces y eficientes.

La composición interdisciplinar del Observatorio es clave para potenciar su utilidad. Por ello se nutre de representantes de la Dirección General de Salud Pública, la Oficina Española de Cambio Climático, el Organismo autónomo Instituto de Salud Carlos III, la Agencia Estatal de Meteorología, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, la Dirección General de Protección Civil y Emergencias (adscrita al Ministerio del Interior), la Agencia Estatal Consejo Superior de Investigaciones Científicas, el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) o el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (adscrito al Ministerio de Ciencia e Innovación (CIEMAT)), entre otros.

Este órgano ya nace con funciones y con agenda de trabajo.

Algunas de las funciones más destacables son:

-La revisión y actualización de los indicadores existentes en materia de salud y cambio climático.

-Creación de sistema de alertas y avisos de diversas amenazas asociadas al cambio climático

-Impulso a la concienciación ciudadana de la autoprotección, especialmente importante en comunidades sensibles, frente a los episodios y efectos del cambio climático y sus enfermedades.

Asimismo, se le encomiendan importantes trabajos tales como:

-definición de umbrales de aviso del sistema Meteoalerta en relación con los posibles impactos en la salud de las personas.

-definición de patrones de variación de temperatura orientados a la detección de situaciones de potencial peligrosidad (como los cambios bruscos de temperatura)

-creación de sistema de avisos por riesgos climatológicos

-actualización del sistema de muertes por temperaturas extremas en España

-desarrollo de un plan de vigilancia de morbimortalidad asociada al impacto del cambio climático.

 

Es éste, sin duda, un organismo con funciones de relevancia, dirigidas a mejorar la salud de las personas previniendo, en la medida de lo posible, situaciones que provoquen un grave riesgo tanto de manera directa como indirecta, al contemplar los efectos de elementos que repercuten directamente sobre la salud como son el aire limpio, el acceso al agua potable o la seguridad alimentaria.

La capacidad de predicción y, por tanto, de anticipación a situaciones extraordinarias dotará a la ciudadanía de mecanismos que mejoraran su capacidad de reacción y, por lo tanto, su calidad de vida que es, entre otras, una de las metas buscadas.

 

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